31 octubre 2009

Elizabeth Morris a veces me entiende


Busco la claridad,
la ternura en una mirada.
Busco el rumor del mar
aleteando entre mis pisadas.
Busco entre tierra y sol
el espacio para un abrazo
que me envuelva
como tu piel.
Busco un lugar
para amarte con calma.

Guardo en la soledad
reunidos como en bandada
besos al despertar
a la espera de tu llegada.
Guardo en el corazón
un tesoro desenterrado
en nuestra infancia
y un girasol
Guardo el color
de un ocaso en verano.

Busco al amanecer
un cometa encumbrando sueños
Busco donde poder
celebrar el fin del invierno
Busco para encontrar
un espejo, un timón y un viento
que me guien hacia otro mar.
Para poder continuar
navegando hacia otro mar.

El primero y el último

La luna sigue mostrando el mejor lado que desea vean de ella.
Se entretiene observándonos, contemplando nuestros pasos
Desde muy arriba, allá cerca donde el cielo dejó un espacio vacío
Ella se deslumbra viendo como el ser humano logra hacerse el camino.

Miramos los circulos, nos miramos luego las manos, el rostro
Esparcimos las ganas, el alivio, la alegría de sentirnos vivos
Se nos quedan las palabras atrapadas en una botella, dentro del cuello
Mientras dedicamos nuestro momento a enredarnos en sus cabellos.

El sonido de una nota contenida desde hace mucho más de un compás
se hace presente en nuestra melodía.
Se convierte luego en poesía, poseiéndose entre los murmullos del querernos.
La memoria hace efecto, el recuerdo no se borra como una tarea mal hecha.

Tomas entonces la iniciativa de tocar con tus yemas cada trozo del cuerpo ajeno que tienes frente, sobrecogiendo los capilares, las ansias de que sea cierto, y no parte de una alusinación, tal como aquellas que soñaste alguna parte antaña de la existencia de algo que nunca podría ser. La luz no existe, los instintos se activan, la percepción aguda coge entre mis lágrimas algo más que un deseo prohibido; toma algo más que un miedo abortado, se convence de querer permanecer dentro de una habitación desconocida para el oyente, que sólo cree escuchar lo que siente. Las palabras salen casi por inercia, los sentidos entonces se conectan, se escuchan entre la bruma, entre el silencio de tus súplicas por permanecerte. Se abre un cajón, se quitan las sábanas de la conciencia, se moja el paño impúdico de tu rostro, quédate un rato regocijado en mi recuerdo, olvidandote como eres, idealizando cada caricia, cada movimiento planeado, como viajando entre ciudades sin ser vistos, porque estoy dentro de la existencia del que relata, del que olvida, del que hiere. Y aún así permanezco entre tus sensaciones, tocando tu boca, sintiendo tu aliento, negando lo real, queriendo el paraíso de algo que no es eterno. Se suelta el deseo, se ignora la diplomacia, se quedan entre nubes permitiéndose estar cerca. Olvida que tus ojos han querido perpetuar en el placer de una noche, siente como las caricias nos llevan a un mundo paralelo, no consideres algo más que la luz de la luna, la noche cálida, el susurro de un beso, la distancia entre ideas escandalosas y cuentos de hadas encantadas.

Quiero sacarte para siempre de mi cuerpo, quiero sentirte sólo entre mis dedos, negándote por completo, negando que la idea de caer a un estanque fué mutua, y ahora las luces encandilan mi renacer entre tanto líquido sumergido.

Puedes quedarte observando como viajo en las aguas turbulentas de la idealización, no entres sin invitación, no te quedes esperando a que te pida secarme si realmente prefiero tomar los rayos de la luna con las gotas de agua cayendo por mi cuerpo.

Ya no hay conexión ni siquiera entre estas letras, ni siquiera entre la idea loca de dar cuenta que la persona responsable de estas líneas fui yo.

Por alguna razón tonta, tuve la idea de que durmieras cerca de mis entrañas; sin embargo hoy prefiero que te desveles a poner un dedo en mi cama.

Mrs. Smith

30 octubre 2009

Quiero Repartir una danza

La primavera tiene sus efectos. Pareciera que el polen de las flores infecta de diversas formas; aunque todos se drogan con ésta maravilla, cada uno tiene su propia estrategia de saber sentir la vida.

El miedo está siempre presente en el ser humano; se teme cometer errores, se buscan explicaciones lógicas para quedarse tranquilo. El miedo, sobre todo en primavera, es un mundo que no deja de ser explorado, pero nos proporciona el momento preciso - quizás - de llegar a la gloria.

Y yo me contagio, me quedo mirando como muchos pasan por estados tan complejos como el ser felices, sin darse cuenta; o sentirse tristes porque el día era más o menos luminoso de como ellos lo imaginaron.

Soy feliz

Siempre llego a lo mismo, y no me importa, sigo siendo feliz. Aunque cambien los días, aunque la escritura se vuelva más realista, menos idealista, más sincera.

Soy un ser de canto, a quien le recordaron que podía volar. Porque yo sé que vuelo, en otras situaciones, en otros escenarios. Todos a su modo, en su momento, llego incluso a la misma felicidad que percibo entre mis palabras, ó miradas al andar.

Quiero volverme un poco más efímera, quiero que las letras me acompañen en la travesía.

-------o-------

No quiero recordarte como lo que quise que fueras para mí.

No pretendo que pase el día, y quiera saber algo más que tu nombre.

No quiero sentirme parte de tus pensamientos, ni tampoco de tus ideales de perfección.

No pretendo quedarme hasta tarde para irnos juntos, ni menos que mi rutina gire en torno a tus palabras.

No quiero que te fijes tanto en mi rostro cuando te hablo, no quiero que te acerques como lo haces cuando escuchamos.

No quiero verte como algo más, no quiero presentirte como si algo fuera a pasar. No quiero que las mañanas sean un letargo, ni que las tardes sean en pausas completas.

No espero que desaparezcas, ni que te alejes de un segundo a otro, menos si no pueda entender el porqué.

No quise que me gustaras, no quise que la relación terminara como está ahora.

Pero sí quiero que de alguna forma, y ya no juntos, alcancemos ambos la felicidad que buscamos.

Quiero que así como soy yo de sincera contigo, tomes un día mi mano y me abras las ventanas de tu alma, Completamente, como quien quiere hacer aseo profundo dentro del cuerpo.

Quiero volver a confiar como antes en ti, quiero que las palabras broten como si nada de mis labios, sin pensar en que afectarán el resultado.

Quiero por un segundo negar que la vida nos cambió el camino, quiero obviar que la vista tomó un solo sendero, quiero que las cosas sean tan sanas como antes lo fueron; .......quiero creerte.

Pero aun así sigo feliz

Porque a pesar de que el daño aún persiste a veces, en trozos de media hora, puedo decir que no, puedo escucharme, puedo elegirme en vez de pensar en ti. Porque ya no duele tanto el saberte – en potencia – acompañado, más duele el quizás saber sin que me lo hayas dicho personalmente. Porque ahí es donde se conectan las ideas, ocurre una unión entre el párrafo anterior, y éste. Porque me estoy olvidando de lo que pensé podrías ser para mí, enseñándome el tiempo que ése no era el camino correcto.

El corazón, pobre que ha caminado tanto sin encontrar destino. Los demás han llegado con júbilo a su meta respectiva, y él aún sigue tranquilo su rumbo establecido por mi conciencia que extrañamente a veces se atormenta, y otras simplemente se queda mirando, como esperando que el segundo apropiado vuelva a tocar la puerta. Por ahora habrán otras cosas que desarrollar, como siempre el compartir con alguien cercano queda en modo “Stand By”.

No me importa, porque igual comparto. No me influye porque aun quiero a la gente. Porque quizás me falte conocer aún mucho más de lo que ya sé, para que después la experiencia sea aún mejor, sin tantas caídas ni desilusiones.

Tengo un poco de miedo, tengo miedo a amar de nuevo … Pero son riesgos que vale la pena tomar.

Es que es efecto de la primavera.

Mrs. Smith

Quiero repartir una danza

La primavera tiene sus efectos. Pareciera que el polen de las flores infecta de diversas formas; aunque todos se drogan con ésta maravilla, cada uno tiene su propia estrategia de saber sentir la vida.

El miedo está siempre presente en el ser humano; se teme cometer errores, se buscan explicaciones lógicas para quedarse tranquilo. El miedo, sobre todo en primavera, es un mundo que no deja de ser explorado, pero nos proporciona el momento preciso - quizás - de llegar a la gloria.

Y yo me contagio, me quedo mirando como muchos pasan por estados tan complejos como el ser felices, sin darse cuenta; o sentirse tristes porque el día era más o menos luminoso de como ellos lo imaginaron.

Soy feliz

Siempre llego a lo mismo, y no me importa, sigo siendo feliz. Aunque cambien los días, aunque la escritura se vuelva más realista, menos idealista, más sincera.

Soy un ser de canto, a quien le recordaron que podía volar. Porque yo sé que vuelo, en otras situaciones, en otros escenarios. Todos a su modo, en su momento, llego incluso a la misma felicidad que percibo entre mis palabras, ó miradas al andar.

Quiero volverme un poco más efímera, quiero que las letras me acompañen en la travesía.

-------o-------

No quiero recordarte como lo que quise que fueras para mí.

No pretendo que pase el día, y quiera saber algo más que tu nombre.

No quiero sentirme parte de tus pensamientos, ni tampoco de tus ideales de perfección.

No pretendo quedarme hasta tarde para irnos juntos, ni menos que mi rutina gire en torno a tus palabras.

No quiero que te fijes tanto en mi rostro cuando te hablo, no quiero que te acerques como lo haces cuando escuchamos.

No quiero verte como algo más, no quiero presentirte como si algo fuera a pasar. No quiero que las mañanas sean un letargo, ni que las tardes sean en pausas completas.

No espero que desaparezcas, ni que te alejes de un segundo a otro, menos si no pueda entender el porqué.

No quise que me gustaras, no quise que la relación terminara como está ahora.

Pero sí quiero que de alguna forma, y ya no juntos, alcancemos ambos la felicidad que buscamos.

Quiero que así como soy yo de sincera contigo, tomes un día mi mano y me abras las ventanas de tu alma, Completamente, como quien quiere hacer aseo profundo dentro del cuerpo.

Quiero volver a confiar como antes en ti, quiero que las palabras broten como si nada de mis labios, sin pensar en que afectarán el resultado.

Quiero por un segundo negar que la vida nos cambió el camino, quiero obviar que la vista tomó un solo sendero, quiero que las cosas sean tan sanas como antes lo fueron; .......quiero creerte.

Pero aun así sigo feliz

Porque a pesar de que el daño aún persiste a veces, en trozos de media hora, puedo decir que no, puedo escucharme, puedo elegirme en vez de pensar en ti. Porque ya no duele tanto el saberte – en potencia – acompañado, más duele el quizás saber sin que me lo hayas dicho personalmente. Porque ahí es donde se conectan las ideas, ocurre una unión entre el párrafo anterior, y éste. Porque me estoy olvidando de lo que pensé podrías ser para mí, enseñándome el tiempo que ése no era el camino correcto.

El corazón, pobre que ha caminado tanto sin encontrar destino. Los demás han llegado con júbilo a su meta respectiva, y él aún sigue tranquilo su rumbo establecido por mi conciencia que extrañamente a veces se atormenta, y otras simplemente se queda mirando, como esperando que el segundo apropiado vuelva a tocar la puerta. Por ahora habrán otras cosas que desarrollar, como siempre el compartir con alguien cercano queda en modo “Stand By”.

No me importa, porque igual comparto. No me influye porque aun quiero a la gente. Porque quizás me falte conocer aún mucho más de lo que ya sé, para que después la experiencia sea aún mejor, sin tantas caídas ni desilusiones.

Tengo un poco de miedo, tengo miedo a amar de nuevo … Pero son riesgos que vale la pena tomar.

Es que es efecto de la primavera.

Mrs. Smith

18 octubre 2009

Sigo aquí


Sí, en efecto el mundo sigue girando, y hasta cierto punto es bastante bueno … Aunque a veces me hierva de tonta la sangre por dentro, de tonta porque soy yo la que le sigue echando leña al fuego.

Los días pasan, y sigo viva, me atormenta la felicidad que llevo dentro, conmigo tranquila, conmigo en buen estado; se sabe bailar, se aprenden cosas nuevas, sin necesidad de preguntar por alguien, o sin querer que otro se entrometa.

No entiendo muchas cosas, y sin embargo pasan… Porque nada las detiene, porque así suceden y todo aquel que no se de cuenta antes de tiempo, sufrirá las consecuencias de la desdicha hundida al interior del pecho.

No debo quejarme, no debo mentir… No debo olvidarme, si debo seguir, porque es únicamente por mí que esto está resultando, y me siento feliz de que sea así … Aunque a veces los días me hagan dudar si es que quiero tu compañía, debo mantener la frente en alto, y obviar ese sentimiento que de a poco se va desmaterializando…

Si al final … te lo perdiste.

Mrs. Smith

04 octubre 2009

El error de cargar mierda interior – El acierto de mejorar las cosas, partiendo por una misma

Me carga tener un sentimiento que, al parecer no tiene causa, es una rabia bien escondida, una importancia fundada, una pena adolorida: es mi ser que se queja, desde dentro, al no poder aguantar la ira, el sentirse en desequilibrio, el pensarse como errado, el verse cada día, sin conseguir más que un reflejo vacío, lleno de anhelos jamás cumplidos.

Si supiera la causa de mi pena, el porqué de la incomodidad, quizás podría de alguna forma lidiar con él, sin arrasar con el resto, quienes me miran, desconociéndome, al igual que yo.

  • No me están saliendo las cosas como quiero que salgan
  • Hoy sentí que mi palabra valía poco
  • Ya no puedo hacer nada para estar contigo de la forma que quiero
  • Me siento egoísta
  • No me estoy reconociendo
  • Tengo pena, rabia y miedo
  • No tengo ganas de ir a clases
  • No tengo ganas de responderle al resto
  • No tengo nada que dar, porque todo se consume
  • Me frustra el no poder llorar en paz
  • Me enoja el NO sentir paz
  • Necesito muchas cosas que nadie me da, porque no deben
  • Nadie tiene el deber de hacer algo por mi
  • Ni siquiera estoy conmigo
  • Me siento emocionalmente dependiente
  • No quiero que siga siendo así
  • Me sigo sintiendo sola, porque nadie me espera, busca, ni está a mi lado.

Si hubiera sabido que un beso dejaría así las cosas, quizás hubiera pensado dos veces las cosas antes de darlo.

Me encantaría saber que sientes, que te pasa cuando estás conmigo, si hay alguien más y tomé el papel de la patética en la historia.

Si acaso tus cariños de siempre, en algún momento comencé a mal interpretar, ó tú les estas dando otro enfoque.

Si acaso te arrepentiste de los días anteriores, de despertar por las mañanas y acordarte siquiera de mi nombre.

Y ahora, como tonta despliego un repertorio de sentimientos plasmados en esta hoja, mientras quizás comes o vives.

¿Qué es lo que pasa que no puedo sacarte? Tengo ganas de matar tu recuerdo, pero eso sería olvidar también que fue lo que me gustó de ti.

El no saber el presente incierto me causa temor e impotencia; porque a veces logro convencerte, tú en cambio siempre logras lo que quiero. Sí, es mi culpa, no lo niego, y quizás sin saber te aprovechas, o simplemente es ésa tu intensidad, la revelación, el karma, y yo sentada con ansias de llorar.

¿Por qué me sentiré así entonces?¿es un tema de atención acaso?.

Estoy bien donde me encuentro, pero quizás sea un poco ambiciosa … NO, la verdad es que no lo soy. Es lo que siempre he querido, desde que me di cuenta que podía amar y responderle al otro. Claro, ocurrieron percances entre medio, me desestabilicé un buen tiempo, pensé lo había logrado, y ahora me doy cuenta que mi corazón sigue roto.

Sólo yo tengo las respuestas, así que no las buscaré en terceros.

Ignorando la última línea… El resto me hace pensar que estaba mal enfocada … Menos mal después de esto y de hablar con un par de personas, tenga ahora claras mis prioridades … A la mierda el resto, la que importa soy yo.

Y el amor … Aún no lo necesito, primero tengo que velar por estar bien conmigo misma, y de ahí vemos que pasa.

Mrs. Smith

Textos incoherentemente urbanos.

El mundo no hace nada en absoluto por detenerse. Es viernes, ése día, final de una jornada intensamente cargada.

Pasa un animal, se sienta en la fila, se acuesta en el piso.

Se va el tren de tríos triviales, camina el rojo pasión … Y eso que mis ojos no son de un color natural, sino que se encuentran opacos por el trasnoche, cerrados casi por el dolor de muelas que se aloja en mi estómago.

Yo creo que después de escribir me iré a dormir, al ciclo accesible que posee ése caracol peldañoso. Creo que me iré a dormir, pues en la terrenalidad del sueño autista se encuentra la parcialidad de la vida en compañía.

Y no estoy celosa por ver pasar al team Mecano y no ser parte, al contrario, cuando forme parte del elenco, querrá decir que terminé como la loca que escribe a las orillas de un cerro.

Todo se impregna de aroma, de ése recuerdo olfativo que tiene mi tacto emocional; aun no puedo recordar el que hoy en día favorece mis noches, es porque sigue de alguna forma arraigado al sentimiento y a ésa sensación de insatisfacción.

Yo creo que te fuiste, o nunca llegaste. Yo creo que las llantas de los autos deben ser parte del cemento celestial y nosotros aquí abajo, míseras pulgas de mar.

Mrs. Smith

Ésa realidad tan cruda que sufrimos todos.

Aún no proceso del todo, por favor ayúdame a entender porqué pasan éstas cosas … Por qué ahora, cuando todo ocurre tan rápido, se me olvida a veces tu rostro ó tú forma de cantar…

Te fuiste y no logré decirte tanto que guardaba dentro .. Y que aún se mantiene atesorado en mi alma.

No sé si hacer esto me sirva de algo, quizás me ordene un poco el

pensamiento, el rencor y la rabia que tengo de no poder haberte visto, habernos juntado, escucharnos, reír y recordar el porqué hacíamos las cosas.

Y porqué ahora tan sólo las sigo haciendo yo.

Lo primero que quisiera preguntar es porqué tanto hermetismo, acaso lo decidiste así?; y no me siento mal por no haberme enterado, sino por los incluso más cercanos a ti.

Tuviste tanta fe en todo y sin embargo no valemos nada en este momento para ti; pensaba ir a verte, no esperaste quizás porque ya no podías más. Y ahora no sé quien es la egoísta en esta historia, aquí el mundo sigue girando tan rápido como siempre y comienzo de a poco a marearme.

Y nadie entiende que estoy así por ti, y por tu partida tan fugaz.

Tenías tantas ganas, y yo lo creía cierto. Tenías tanta fuerza que podía sentirla desde la distancia, desde éste mar que tan cerca tengo y que ahora incluso me es más cercano que tú.

Tengo un enredo, tengo una duda no resuelta, un nudo en la garganta, una cosa ó muchas que nunca pude decirte, porque era niña, porque tenía miedo, porque me dejé estar, porque sentía culpa, porque quería volver a ser tu amiga como cuando éramos pequeñas y entendíamos que la voz decía mucho por nosotras.

¿Por qué el tiempo no se detuvo?

Te acuerdas que me costaba llamar … Bueno, aun tengo ese problema, y es que he sido tan racional últimamente que los sentimientos se han quedado en lo más hondo, y ahora no saben como salir de mí.

Siempre me entero después que el resto … ¿Será porque lo quiero así?; o fuiste tu quien hasta el final no permitiste que nadie entrara

¿Por qué?

No entiendo ésa actitud, y es por eso que no estoy creyendo lo que sucedió ayer … si “hablamos” hace poco menos de un mes, y aunque esa maldita enfermedad no se había ido, me hiciste saber que por lo menos seguías luchando.

¿Estabas muy mal? .. ¿Servía de algo todo lo que te hacían?

Dime si aprendiste algo de la vida, y en que momento te diste cuenta que de a poco se iba yendo, esfumándose de tus ojos.

No, tu siempre tuviste la misma chispa de vida, desde que supiste que algo inesperado acabaría mucho antes de lo que pensabas con tu respiración constante en ésta tierra.

La pasábamos tan bien en esos ensayos de coro, cantando hasta los codos; cantando Coni, ¿cantarías conmigo desde donde estés?; no me acuerdo en éste momento si teníamos alguna canción especial que compartiéramos, sólo esa pasión por un arte tan expresivo como es el cantar. Aunque hayas escogido después el arte del diseño, ese que yo nunca tuve.

Piensa en el resto, en como lo deben estar pasando. Incluso siento que la Naty debe estar un poco más afligida que yo, por la distancia, y yo no tengo de que quejarme, si vivo más cerca que ella de Santiago. Cuéntame que fue lo último que hiciste, me encantaría sentarme a conversar contigo. Porque no te siento ahora, y quizás sea porque estoy bloqueada desde hace mucho. Porque sabía podía hacerlo, pero por miedo lo dejé, me dejé. Ahora de alguna forma necesito escucharte, y no sé de que forma puedo llegar a ti, incluso antes de que pasara todo esto.

Por favor entiéndeme así como yo de a poco logro entender porqué tuviste que irte así. Tengo pocos recuerdos, sólo siento que intenté hacer lo mejor que pude cuando me di cuenta del error que había cometido contigo.

Recuerdo ésas tardes después del colegio, cuando me “presentaste” ésa serie japonesa llamada “Gravitation”, cuando te vi cosplayeando, todo ése empeño que siempre diste en el curso, con nosotras, como nos comenzaste a demostrar a las “carmelitas”, el sentimiento de unión hacia una buena causa: La tuya; estoy casi segura que cantábamos algo juntas, pero ahora no logro recordarlo, aunque sé que está en mi cabeza, pero por alguna razón no quiere salir del encierro.

Ahora, y después de mucho tiempo este escrito me parece la realidad frente a mis ojos, era lo que sentí cuando supe, ahora creo que la realidad sigue igual, sin ti, pero yo ya he encontrado la forma de asumir que ya no estás con nosotros, aunque no quiere decir que ya no existas en nosotros.

Buen viaje amiga mía … Amiga.

Mrs. Smith


Cantemos?? =)