09 mayo 2010

Cerca del mar ... Cerca de mí

No sé que quiero hacer
No se que quiero hacerte
Mi boca se hace poca
Mi cuerpo se atonta

Mi mente desaparece
Mis ojos cerrados
mis labios promulgan
palabras incesantes

Despiertan ...
Algo que todos llevamos dentro
Algo que se enciende
Algo que se siente

Los cuerpos
Tiemblan ... de miedo y de frío
Temblamos

... sigo temblando

Y todo comenzó, cuando yo dije:

"Y por qué no lo has hecho .. ?"

02 mayo 2010

Confía ...

El televisor dejó de ser tu entretención, en el momento que me puse en frente y tapé la pantalla con algo más que un rostro lleno de ideas para recrear.

Mirandome fijamente, preguntaste si acaso tenia algo en mente...
Sin pensarlo dos veces, me acerqué todo lo que pude ... Tus ojos se reflejaron en los míos, a pesar de la oscuridad de la noche ... Tus labios generosos atraparon mi cuello, mientras mis manos comenzaron a buscar por debajo de tu camisa, sentirte con ganas.

Olvidaste el sonido externo, te centraste en sentir mis murmullos de placer mientras bajabas tu boca por donde comenzaste. La ropa empezó a sobrar, quedando en el suelo de la ignorancia, quisiste entonces que descansaran nuestros cuerpos en aquel sillón cercano, nunca dejando de hipnotizar mi piel con tus besos intensos.

El espacio se hacia cada vez más íntimo, los roces constantes, y el deseo latente. Nuestros besos se mezclaban en una ola de sensaciones inevitables, mis manos, mis uñas, sintiendote, tocándote, vibrando ambos, tus manos en mi cabello, tu agresión controlada ... Despertabas a cada momento pequeños impulsos de lujuria y distorción.

El sillón pasó a ser suelo ... El suelo se convirtió en sábanas tibias de tanto anhelo.
Un desorden constante en la habitación despertó la bestialidad del hombre.
Y la satisfacción de la mujer que cada vez sentía podía llegar más lejos, y a la vez más cerca de lograr...

la epifanía certera de sus existencias.

Es solo el comienzo

Acaso creíste que era una niña?
no te diste cuenta, hasta que te viste enlazado en mis encantos
Enrollado entre mis besos
Atrapado por ésa noche de verano, entre luces de lunas cambiantes.

Las ansias salían de nuestros poros, se mezclaban con el entorno, el ambiente no pudo con nuestrass adicciones a ser del otro, y sin querer nos vimos tan cerca que nuestras manos dejaron de ser un estorbo, y se convirtieron en el comienzo de un idilio intenso.

Como tus labios rozaban los míos, como tus manos jugaban cerca de mi espalda, como te aferrabas a mí, sintiendo como si tu anhelo se convirtiera en mi carta maestra para jugar un rato.
El cuerpo dejaba sus rastros en las paredes, en las butacas, en las sillas, y aún asi seguimos con nuestro baile penetrante y exquisito, mordiscos de miel se cruzaban entre ambos deseos constantes, contribuyendo a la gama amplia de emociones vertidas en menos de doce horas.

Los ojos se cerraban a veces, no sentía nada más que tu deseo de ser tuya, hasta el cansancio, hasta las últimas ganas de tomar mis ansias y convertirlas en posesión propia.
Nos volvimos locos, una locura extrema nos bañó de pies a cabeza, comprometiendo tus deseos y los míos, tu cansancio se olvidaba entre recuerdos.

Como recordar tus besos tan intensos, y la forma en que tomabas mi espíritu
Como te hice sentir ... Mis ganas interminables de desearte...

un rato.