Era mejor estirar las piernas; a pesar de llevar conmigo algo similar a un peso muerto, algo que viene saliendo de tanto tiempo antes de querer volver a nacer. Era mejor así, salir a dar una vuelta de cara al mar, y de cara también a los recuerdos, a cada pisada que mis zapatillas planas daban al suelo.
Son situaciones circulares las que se apoderan ahora de mi existencia, y de a poco intento sacarlas todas de mi ser. Y hoy, finalmente pude llegar a ese lugar incorrecto en la actualidad, y plantarme un rato a recordar sin remordimientos ni angustias.
Sin siquiera pensar que podría ser mejor recorrer los mismos pasos en compañía tuya, o quien sabe de que fulano asombrado por el camino. Nada ni nadie me llevó a ese momento, y ahora fui yo la que recordó la ruta.
Somos ya dos nuevamente. Desde hace tiempo no lo eras tú para mi, hasta hoy, cuando llegué al balcón de los recuerdos, cerca de la fortuna mundana de esta costa, justo en el momento que me posé en aquel mismo lugar, y miré Valparaíso con otros ojos.
Con los de ahora.
Con los ojos bien abiertos nuevamente
Sin tu rostro nublándolos como antes.
La negra noche, la luna ..
Nos ofrecían atmósfera ese día.
Y hoy fue otro el escenario, otra la entrega
Hoy fui yo quien finalizó el calvario inútil de no haber sentido verdadero amor.
Y que triste suena, pero después de mucho, nos permito caminar.
Y nos permito vivir, aunque yo ya no viva para tí y tu nunca hayas vivido para mí.
Son equivocaciones de la vida, son cosas que se deben aprender una vez hayas realizado el paso incorrecto y te demores una eternidad en descifrar como salir del embrollo.
Pero de algo me di cuenta hoy:
De que mi alma volvió finalmente .. FINALMENTE!!! ... a su centro
Y ahora, luego de tantos altos y bajos
Se queda conmigo, tranquila, esperando gozar de la vida.
Costó llegar a este punto
Pero finalmente el día llegó
Y me siento feliz
Por sentirme verdaderamente libre.
Por sentirme
Y por existir un día más.